Minas de chi en Tamashkhan
Los jugadores son llevados a un campo de trabajo en Tamashkhan tras ser condenados por herejía en la anterior aventura.
Los jugadores llegan a su nuevo hogar, un campo de trabajo en medio del desierto Temash. Ahí conocerán al alcaide Zebulon, un hombre estricto y cruel quien dará un discurso a los recién llegados explicándoles que aquí podrán redimirse de sus pecados a través del trabajo. Si alguien osa desafiar a Zebulon o decirle algo que interpreta como un insulto el alcaide ordenará a su esclavo gnoll Yaxxgaw a pegarle una violenta paliza para “dar ejemplo” (esto lo hará un prisionero PNJ si ningún jugador habla). Los jugadores después son conducidos a sus celdas y tienen la oportunidad de descansar antes que empiecen los trabajos forzados. Los jugadores perderán todo su equipamiento y debido a la curiosa naturaleza del chi en la tierra todo el área de la prisión está afectado por un campo antimágico que también anula todos los poderes mágicos de toda clase.
Los guardias despiertan a los jugadores al salir el sol y son conducidos a las minas de chi, donde deberán trabajar incansablemente con solo dos descansos, uno para desayunar y otro para comer. Las minas de chi son un lugar infernal caracterizadas por su calor abrasador, andamios peligrosos y vapores nocivos provocados por la extracción de cristales de chi. Aquellos que son incapaces de seguir con el ritmo de trabajo son golpeados por los guardias y en caso que intenten atacar a un guardia serán enviados al zulo durante unos días, el cual es un agujero a oscuras localizado en lo más profundo de la prisión donde carecerán de contacto humano. Para simular mejor esta experiencia el máster puede requerir a los jugadores a realizar tiros de fuerza o constitución para determinar lo bien que les va en las minas de chi.
En los tiempos de descanso los jugadores tienen la oportunidad de interactuar con los demás prisioneros, entre los que se encuentran Regulus, Kendell, Sheved y Thirion, además de un extraño anciano que rechaza contacto con los demás.
Los jugadores interactúan con el extraño anciano, quien se presenta como el gran sabio Pandeshar. Este parece que oculta muchos secretos y está algo ido de la cabeza. Extrañamente, Pandeshar tiene varios privilegios que no tienen los demás presos y el alcaide le da un trato especial.
En el caso que los jugadores intenten escapar no solo deberán evadir a los guardias y cruzar las defensas del campo de trabajo, sino que fuera no hay más que eterno desierto temash. Huir es en casi todos los casos una misión imposible salvo que se planifique muy bien y si los jugadores son capturados mientras huyen pasarán un tiempo en el zulo.
Por un motivo u otro los jugadores provocan una pelea en la prisión o son arrastrados a ella. Hay tensiones existentes entre los prisioneros temash y los mekhatimitas, los cuales forman los grupos más numerosos en la cárcel y están encabezados por Sheved y Kendell respectivamente. Sheved es un antiguo revolucionario temash que combatió junto a Laicon, teniendo un profundo odio hacia tanto Ustilus como los jugadores, mientras que Kendell es un fanático adorador de Mekhatim quien busca convertir a los jugadores a su fe para que ellos también puedan alcanzar la redención (también trabaja en secreto con el alcaide y se encarga de mantener la paz entre los presos).
Aquellos jugadores que trabajen duro o hayan sido afines con la secta en el pasado son invitados por el alcaide al cabo de un mes en el campo de trabajo. El alcaide les dice que su señor está dispuesto a darles una segunda oportunidad y si siguen portándose bien podrán ascender en un futuro a guardias de la prisión y luego quizás obtener la libertad. Les cuenta además que puede plantearse ascenderles más rápido si le denuncian algún intento de fuga.
Preso (nivel 2)
Guardia de la prisión (nivel 2)
Guardia de élite (nivel 6)
Centinela (nivel 6)
Yaxxagaw (nivel 14)